Ya sea que esté en una reformación profunda o simplemente esté tratando de redecorar, hay mucho más en el diseño de una propiedad de lo que cree. Los expertos de Reformas Zaragoza, consultores de renovaciones y diseñadores de interiores, lo ayudarán a reconocer los errores más comunes que cometen los nuevos propietarios, para que usted no siga sus pasos.
1. Comenzar las reformas demasiado pronto
Si es posible, viva en su casa por un tiempo antes de hacer planes para una reforma. Aprenda cómo fluye, dónde aterrizan los alimentos, hacia dónde quiere ir la ropa sucia, cómo le da el sol, en qué dirección se inclina la lluvia, e incluso tenga una idea de a dónde van sus desechos. Todo esto le ayudará a tomar una decisión informada cuando haga planes para cambiar las cosas.
2. Subestimar los costos
La mayoría de los trabajos costarán más y tomarán más tiempo de lo esperado, por lo que siempre agregue un 20 por ciento más a lo que cree que totalizará un proyecto al presupuestar. Si no tiene los fondos, recorte el trabajo. Si superas estas proyecciones, entonces puede estar tranquilo.
3. Esperar que todo salga según lo planeado
El trabajo en edificios antiguos puede producir muchos imprevistos. ¿Quién sabe qué hay detrás de esa pared que estás abriendo? Las nuevas construcciones están más controladas, pero eso no siempre significa que la reforma sea más fluida. Prepárate para lo inesperado. Es una falla humana esperar que todo salga de acuerdo al plan. Lo único seguro es que, nada lo hará.
4. No contratar a un diseñador desde el principio
Si estás a punto de gastar más de lo que creías posible, bien podría ser en algo diseñado correctamente. Los diseñadores de interiores y arquitectos normalmente cobran por hora o toman un porcentaje del trabajo total, una pequeña suma en comparación con su pago total.
5. Optar por la oferta más baja
Una buena ayuda profesional vale la pena. Eso significa diseño y construcción. Esté dispuesto a pagar por un buen contratista y desconfíe del que es barato y está disponible de inmediato.
6. Contratar a un profesional que no sea adecuado
El hecho de que alguien sea un buen diseñador no significa que será una buena opción para ti. ¿Tienes la misma estética? ¿O al menos las mismas prioridades? Si no te hace muchas preguntas sobre tus necesidades, deseos y tu forma de vivir, busca a otra persona. Las habilidades para escuchar y la curiosidad son cruciales.
7. No pedir referencias
Es recomendable ponerse en contacto con los tres clientes anteriores de cualquier persona que planee contratar. Estas personas habrán experimentado al trabajador en su nivel laboral y personal. Comuníquese con los contratistas generales para obtener referencias de un arquitecto y viceversa. Y visite los sitios de trabajo de sus candidatos para averiguar si le gusta lo que ve en términos de limpieza y estilo.
8. Esperar demasiado para consultar a un contratista general
Pídale a un contratista que mire los planos en la etapa esquemática, en lugar de los planos terminados. De esta manera, puede averiguar si su proyecto se encuentra dentro del presupuesto adecuado antes de enamorarse de un plan y pagar por un conjunto completo de dibujos que pueden no completarse. También es una buena forma de conocer a posibles contratistas, obtener sus aportaciones y no malgastar su tiempo.
9. Fingir comprender un esquema de diseño
Realidad: la mayoría de la gente no puede leer planos. En lugar de mirarlo a simple vista, diseñe una habitación, un edificio o un jardín de verdad. Dibujar un espacio por sí mismos funciona mejor que cualquier aplicación de diseño para comprender cómo encajarán las cosas.
10. No hacer suficientes preguntas
Haga muchas preguntas. No existe nada tonto y, además, es tu dinero lo que estás gastando. Deberías saber por qué y para qué.
11. Hacer demasiados cambios en el camino
Los cambios que le parezcan simples pueden requerir mucho trabajo, así que asegúrese de consultar con su diseñador o constructor incluso sobre los ajustes más pequeños. Hasta mover un interruptor de luz unos pocos pies puede costar mucho dinero.
12. No establecer un cronograma
Trabaje con su contratista para elaborar una lista de los artículos que deben comprarse y los plazos para tomar decisiones. Lo último que quieres es sentirte bajo presión para hacer una selección de accesorios importante de la que luego te arrepientas.
13. No pensar fuera de la caja, literalmente
Las canaletas, la nivelación y los techos pueden sonar aburridos cuando hay candelabros por los que obsesionarse, pero tienes que construir un sobre sólido si quieres que tu casa aguante. Si se enfrenta a la opción de trabajar en el exterior o en el interior, comience desde el exterior.