Guía para elegir los metales adecuados para pendientes y piercings. ¿Qué metal elegir para evitar alergias o infecciones?

Los piercings son una forma de arte, y también implican un gran cambio para tu cuerpo, lo que significa que este proceso debe comenzar a su debido tiempo, que es cuando te sientas listo. Así que, ve a continuación todo lo que hay que saber sobre las perforaciones, sobre cómo elegir el modelo correcto, el metal y la posición.

Es muy útil tener una idea de qué tipo de piercing es el adecuado para usted. Las redes sociales son una excelente herramienta para ver los distintos tipos que existen; Instagram tiene miles de imágenes que pueden ser inspiradoras, con posiciones interesantes y distintos tipos de hermosos aretes. Por lo tanto, antes de hacer una cita para hacerse un piercing, es muy recomendable que primero se haga una idea de lo que desea. Sin embargo, recuerde estar preparado para la flexibilidad, ya que es posible que su cuerpo no sea adecuado para la perforación que prefiere.

Y así como por un lado es necesario buscar el piercing adecuado, por otro lado, es recomendable entender quién realizará el piercing. Por esta razón, se recomienda que, en primer lugar, visite la tienda del perforador en persona, para verificar sus estándares de limpieza y hacer cualquier pregunta relevante. Quien realiza el piercing debe hacerte sentir cómodo y responder respetuosamente a todas las preguntas que se le hagan.

Elegir el piercing adecuado

Para elegir el piercing perfecto para ti, primero debes considerar el color del pendiente que mejor se adapta al color de tu piel. Posteriormente, es muy importante entender dónde quieres ubicar el piercing para saber si hay algo ‘malo’ en tu cuerpo (cicatrices o similares) que pueda distraer tu mirada del piercing en sí. Por el contrario, también es posible hacerse un piercing para llamar la atención sobre otro detalle del cuerpo (como los ojos o los labios).

En este sentido, debe comprender bien su anatomía para asegurarse de que la perforación se ajuste correctamente. Una joya bien hecha es como un vestido que mejora el cuerpo y como un piercing, una vez hecho, prácticamente siempre se guarda, elegir dónde colocarlo se vuelve de fundamental importancia.

La curación

Una oreja bien cuidada no se ve en la cantidad de piercings, sino en la calidad. Cuando esté a punto de hacerse un piercing, debe mirar inmediatamente más allá, en el sentido de que debe pensar inmediatamente en la curación de la oreja (o la parte del cuerpo donde se realiza el piercing). Entonces, si tiene la intención de hacerse más de uno, es mejor posponer las perforaciones en varias sesiones.

Nota: Tenga siempre en cuenta que las joyas deben ubicarse de manera que se adapten perfectamente a la anatomía del usuario, coincidiendo con su estética personal. El consejo es no tener más de 3 o 4 perforaciones en una sola oreja en total.

La elección del metal

La elección del metal adecuado es otro factor importante a considerar. Es recomendable elegir un color dorado de los pendientes que esté a tono con tu color de piel y que te haga sentir lo más cómodo/a posible.

Los metales hipoalergénicos sin níquel se utilizan ampliamente porque minimizan cualquier reacción y, por lo tanto, aceleran los tiempos de curación. En el ombligo, en el tabique nasal y, por supuesto, en las orejas: los pendientes y piercings pueden ser el tipo de bisutería que prefieras, pero tienen contraindicaciones.

De hecho, es posible que su piel no tolere el contacto con algunos tipos de metales. ¿Cómo saberlo? Para empezar, si tu piel se vuelve negra cuando usas joyas de plata u otros metales, es probable que seas alérgico al níquel, un elemento que se usa muy a menudo en aleación con otros. Este problema puede agravarse si el metal entra en contacto con partes del cuerpo que están irritadas o, peor aún, que no han sanado por completo.

Descubra cuales son algunos consejos para evitar que un piercing se convierta en un problema molesto.

Seleccionar metales seguros

Para perforar, lo mejor es el acero quirúrgico (es decir, acero inoxidable quirúrgico, con la abreviatura SSS). Este metal tiene varias ventajas: dura mucho tiempo, no reacciona con los fluidos corporales. Está marcado con las iniciales 316L o 316LVM. Pero ojo: este acero contiene un pequeño porcentaje de níquel. Las personas alérgicas pueden elegir un producto más caro pero más seguro: el titanio. Es un metal súper fuerte y generalmente contiene solo cantidades muy pequeñas de níquel.

Otro metal recomendado es el niobio. Es poco conocido, pero es adecuado para personas alérgicas y también es menos costoso que el titanio. Si realmente tiene la piel sensible al contacto con cualquier metal, puede recurrir al Tygon, un plástico quirúrgico que se puede usar para perforar.

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